El vacio de la ausencia.

Soñar con un ser amado que ya no está, es una experiencia enormemente agridulce.  Podemos verlos, tocarlos y darles nuestro amor por unos momentos pero al despertar; percatarnos de la ilusión es volver a caer en el vacío de su ausencia.

Hoy soñé con Chili, una vez más, como tantas noches desde su partida.  Han pasado escasos seis meses y no hay un solo dia que no lo piense o lo recordemos con familia y amigos.  A diario reímos con los recuerdos, imaginamos lo que haría, donde estará; tratando de mantenerlo vivo a través de las memorias y usualmente termino con los ojo nublados, extrañando todas esas cosas de ese pequeño ser de infinito amor que me lleno de alegría por trece cortos años.

No quiero hablar mucho de lo que paso, o de lo que fue la experiencia de perderlo.  No se si algún dia se superan sus despedidas, muchos dicen que no, que simplemente aprendemos a vivir con su ausencia.  Pero hoy no es el mejor momento para adentrarme en esos tema.

Varios meses antes del fin, había escrito una carta para Chili, hoy quisiera compartirla con ustedes en este espacio, esperando que alguien más como yo, guarde en lo más profundo de su pecho sentimientos similares, y que los que aún tiene la fortuna de tenerlos, sepan lo dichosos que son, pues lamentablemente, la vida a su lado es corta, y cada dia es un tesoro invaluable.

"Querido Chili,

Sé que no puedes leer, ni muchos menos entender el significado de esta carta, pero tengo la certeza de que tu corazón conoce los sentimientos que atesoro, y si pudiera darte este mensaje, esto es lo que te diría:

Por años has estado a mi lado, mi vida ha cambiado a lo largo del tiempo, en muchas ocasiones, pero tú amor se ha mantenido constante y fiel… ¡Eras tan pequeño cuando llegaste mí!  Me has hecho reír, llorar, enojar pero sobre todo me has hecho amarte con una fuerza incomparable que se quedara conmigo para siempre. 

Te vi crecer, desde el inicio me enseñaste a ser mejor persona, a ser más fuerte, aprendi a cuidarte y protegerte para darte una vida digna, llena de amor. Hay tantos recuerdos  y tantos momentos que atesoro en mi mente y en mi pecho.  Como agradezco al destino habernos reunido.

Con el tiempo has ido cambiando, sobrepasaste obstáculos y enfermedades, me acompañaste en los días más oscuros y nunca falto una onza de amor para mí.  Tu mirada y tus besos  me llenaron de optimismo, aun cuando todo y todos me tiraban abajo.

A tu lado conocí la bondad, la lealtad, la amistad y el desinterés absoluto, espero poder haberte dado todo lo que te has merecido y que conmigo hayas aprendido que aunque con muchos defectos, algunos humanos intentamos ser buenos como ustedes los animales y aprendemos a querer y a dar cariño sin esperar nada.

Sigo sin comprender porque el mundo es tan injusto, porque tu vida es tan corta y conforme envejeces solo crece la incertidumbre y la impotencia por querer seguir teniéndote a mi lado.

No fuiste el primero, y sé que no serás el último, pero has sido único y perfecto para mí, aun ahora en tu vejez,  eres mi mayor tesoro y prometo quedarme a tu lado, amarte, cuidarte y respetarte hasta el último día de tu vida.

Llorare mucho cuando partas, te llevaras una gran parte de mí, pero sé que nos volveremos a ver, porque si existe el cielo, será donde estarás esperándome junto a todos los que han traído alegría a mis días y que ahora ya no están.

Mientras tanto, seguiremos unidos, compartiendo y coleccionando muchos días llenos de recuerdos y sonrisas.

Gracias por hacerme una mejor persona, por darme y enseñarme tanto y por ser el ejemplo más puro de amor que he conocido.

Con todo mi corazón, TE AMO!"

Chili Dog
2001-2014